Santa Cecilia de Villano, Pastaza, Ecuador. 15 de febrero de 2016
Reporta: Yakuschaski Warmikuna
Las mujeres amazónicas que en 2013 llegamos hasta Quito para denunciar la contaminación y la amenaza de la explotación petrolera en nuestros territorios, continuamos la lucha caminando al lado de nuestros pueblos y comunidades. Somos mujeres shiwiar, waorani, kiwchas y sáparas, y hemos navegado por las cuencas del Bobonaza (en 2015) y ahora del Curaray, llevando la encomienda de recoger las opiniones, sentires y mandatos de nuestros pueblos, cada vez más afectados por la presencia las empresas petroleras, madereras y mineras.
Este 15 de febrero de 2016, reunidas en la comunidad de Santa Cecilia de Villano (Pastaza) y acompañadas por nuestras compañeras de Otavalo, Saraguro, Saramanta Warmikuna y colectivos aliados, hemos comenzado nuestro Yakuchaski Warmikuna que recorrerá el río Curaray, pasando por alrededor de 15 comunidades de los linderos del Yasuní.
Somos una caravana de mujeres mensajeras de los ríos, y estamos seguras de que mantener el petróleo bajo tierra es la solución más realista ante el cambio climático. Es por eso que retomamos los saberes y las prácticas ancestrales de nuestros pueblos, porque es ahí donde se encuentran las verdaderas alternativas al desastre ambiental y social al que nos orilla el sistema económico actual. Así, nos proponemos fortalecer nuestras formas de vida cultural, política y territorial en nuestras comunidades. Llamamos a la opinión pública nacional e internacional a estar pendiente de nuestra navegación, pues los mensajes de la selva amazónica no sólo nos conciernen a quienes aquí vivimos, sino al mundo entero, al tratarse de uno de los pulmones más importantes que todavía nos quedan. Mantener el petróleo bajo tierra es, por tanto, responsabilidad de todos y todas.
Desde el corazón de la selva amazónico. Yakuchaski Warmikuna.